Desde la fuerza misma de nuestra tierra nace este masaje que mediante maniobras precisas trabaja la musculatura doliente, purgando nuestras cargas, el peso del pasado y sus frustraciones. Esta nueva técnica de Spa se realiza utilizando ungüentos de antaño que entran en vigencia hoy para sanar las contracturas que ocasionan la lucha del día a día y preparar el cuerpo para realizar los nuevos intentos en la búsqueda de la realización personal.